En el Polo Integral de las Mujeres se proyectó “Nosilatiaj” (la Belleza) y “Period. End of Sentence”, la revolución del periodo menstrual. Las producciones audiovisuales fueron disparadores para debatir sobre situaciones culturales vinculadas al género.

En el marco de las actividades por el mes de la mujer de la Secretaría de Derechos Humanos, en la Sala Juana Azurduy del Polo Integral de las Mujeres se desarrollaron dos encuentros de cine debate. En el primero, se proyectó “Nosilatiaj” (la Belleza) y se propuso un intercambio de ideas con la cineasta autora del largometraje Daniela Seggiario y la profesora de la cátedra de Cine de la UNSa, Ana Inés Echenique.

La proyección fomentó el análisis de temas como interseccionalidades de género, pueblos originarios y masculinidades. Nosilatiaj, relata la historia de Yolanda, una joven de 15 años de origen wichi, que trabaja en tareas domésticas a cambio de casa y comida en una familia criolla del Chaco salteño.

“A través de este largometraje se visibiliza que hay un diálogo roto, una incapacidad de abrir un canal de encuentro entre las culturas. El vínculo está roto internamente y eso se proyecta a todos lados. Es nuestro deber y obligación reconstruirlo”, destacó Seggiario.

En el segundo encuentro, se analizó el documental “Period. End of Sentence” junto a referentes de la organización Mumalá Salta y se avanzó sobre la gestión menstrual y el tabú que este tema implica para mujeres rurales, en este caso, de las afueras de Nueva Delhi, India.

En esa ocasión, se evaluó a la menstruación como hecho significativo de las personas menstruantes, su incidencia y atravesamiento en los ámbitos sociales. Se planteó la necesidad de brindar acceso a productos de higiene de necesidad básica y erradicar los mitos vinculados con lo emocional, que en muchas ocasiones estigmatizan a las personas menstruantes.

Las actividades forman parte de la agenda de marzo - Mes de las Mujeres - de la Secretaría de Derechos Humanos, coordinadas por la Agencia de las Mujeres, Género y Diversidad y el Programa de Intervención para Hombres (Priho).